Reseña: Ese instante de felicidad de Federico Moccia

Ese instante de felicidad

Es un libro muy entretenido, se lee con mucha facilidad, pues ya conocemos el estilo de Federico Moccia, desenvuelto, cercano, realista, osado y atrevido según en qué momentos, en definitiva muy personal, lo que lo caracteriza. No podemos negar la habilidad que tiene para describir situaciones y momentos muy diversos, sabiendo darles ese matiz divertido y que en ocasiones rayan lo ridículo, con lo que consigue mantenerte interesado y hacerte soltar más de una sonrisa.

Esta novela se desarrolla en Italia, en su mayor parte en Roma, de donde será nuestro protagonista Nicco. Está explicada en primera persona por él, desvelándonos sus pensamientos, inquietudes, sentimientos y estados de ánimo. 

Es un chico muy sensible de veintitrés años, con un carácter poco marcado y que siempre intenta adaptarse y conformar a los demás. Está pasando por un momento de su vida muy crucial, pues la pérdida de su padre le ha dejado un vacío importante que le cuesta aceptar. Todo se complicará cuando su novia Alessia rompe con él, sin darle ninguna explicación del porqué. Durante la novela, intervendrán distintos personajes, sus hermanas creándole responsabilidades que no desea, su madre sufridora en silencio, compañeros de trabajo que aún le complicarán más la vida, amigos de la infancia, en especial Gio, que será el típico italiano mujeriego y con mucho don de palabra, pero que sobre todo será un amigo leal. No debo de olvidar a las dos extranjeras que conocen ambos amigos, que en este caso son españolas, María y su amiga Paula. Lo que comienza como algo sin querer y pasajero, le dará la oportunidad de comprender y asimilar sentimientos que hasta ahora para él eran imposibles de afrontar. 

Nos deja con ganas de conocer más, de saber que pasará y como todos sabemos, habrá una segunda parte que se desarrollará en algún lugar de España.

Me ha gustado mucho como te enseña la ciudad y te hace partícipe de ese ambiente tan italiano, la forma de mostrar las distintas exquisiteces culinarias que nos presenta, en esos lugares tan peculiares y con costumbres tan propias de allí, resulta todo un placer.

Otra cosa que también me ha parecido muy acertada, es la utilización bastante asidua de pequeños fragmentos de canciones italianas, por suerte, seguidamente traducidas. Consigue dar un toque romántico a los momentos relevantes. 

Y por último, lo que es digno de resaltar, son las muchas frases o reflexiones que utiliza, a cual más bonita y entrañable, me gustaría destacaros alguna: 

“Un beso es un paspartú, un beso es una antigua réflex, un beso es como un molde de arcilla, un beso detiene la imagen en el tiempo, la foto, el detalle, el sabor, el carácter de la persona que te ha besado. Y siempre te quedará de ella ese momento único, especial, irrepetible, ese instante de felicidad.“

Siempre pienso, que cualquier lectura te hace reflexionar, esta te plantea pensar en esos momentos tan difíciles como son la perdida de cualquier ser querido. Crees que te va a ser imposible salir de ese desánimo que te invade, pero siempre existe un motivo para seguir luchando y disfrutar de "esos muchos instantes de felicidad" de los que se compone la vida, permitiéndonos seguir un sueño, y como nos dice nuestro protagonista Nicco, "sin un sueño no se va a ninguna parte".

"Llora, medita y vive; un día lejano, cuando estés en la cumbre de tu futuro, este feroz huracán te parecerá una nubecilla." 

Os recomiendo que lo leáis y lo disfrutéis como un instante más de felicidad.

Mi agradecimiento a Editorial Planeta por ofrecerme este ejemplar.

Ese instante de felicidad Federico Moccia Editorial Planeta 9788408120155 Tapa blanda    416 páginas . 18'90€

SINOPSIS

“Nicco está pasando por una época difícil: su novia le ha dejado y desde que su padre falleció tiene que ocuparse de la familia, que parece haber perdido el norte: su madre no levanta cabeza, su hermana menor cambia de novio cada noche, y la mayor, madre de un niño de tres años, se ha vuelto a enamorar de un antiguo amor. Por si fuera poco, tiene dos trabajos: en el quiosco de periódicos familiar por las mañanas y como agente inmobiliario por las tardes. Además, su mejor amigo no puede decidirse entre dos chicas que van tras de él. 

Pronto conocen a dos jóvenes españolas en Roma y se dan cuenta que la vida es demasiado corta para desperdiciarla pensando en el pasado, así que deciden pasárselo bien junto a las dos extranjeras. Cuando Nicco se da cuenta de que sus sentimientos son más fuertes que una simple atracción física, su chica desaparece sin dejar rastro. ¿Qué debe hacer?"